El arte de sanar a través de tus elecciones

Feb 1, 2023

¡Vaya! Si te has detenido para leer este artículo es porque debes ser una persona extraordinaria y excepcional con unas ganas enormes de tener una vida repleta de buena salud, o también alguien decidido a superar por fin algo que has traído arrastrando desde hace tiempo. Mil gracias y desde hoy mis respetos para tí.

Pues bien, estoy por compartirte como hace seis años revertí mi diagnóstico de Diabetes tipo 2 en tan solo seis meses, y también como otras personas quedan tremendamente sorprendidas al darse cuenta de que entre uno y tres meses empiezan a ver mejorías en sus vidas que ni con los tratamientos más prometedores habían logrado desde hace años. ¿Interesante verdad?

Imagínate que tú, aún con tu predisposición genética, jamás desarrolles ese terrible padecimiento crónico degenerativo que tanto ha lastimado a tus familiares, claro que me refiero al paciente, pero también a quienes lo rodean. Por ejemplo, permíteme preguntarte ¿Qué tan importante es para tí sentirte sano al cien por ciento y en todo sentido? ¿Quiénes además de tí, se sentirían felices y afortunados en el futuro por tu buen estado de salud y calidad de vida?

¿Cuántas metas que aún no has alcanzado, lograrías con una mejor salud? ¿Verdad que es importante?

Pero, seamos realistas. ¿Qué tan seguro estás de que tu manera de vivir actual te está llevando a ese futuro prometedor en cuanto a salud y bienestar? ¿Qué es lo peor que te podría pasar si no hicieras nada y siguieras cuidándote a medias o dejando todo del lado de la suerte? ¿Qué te impide empezar a cuidarte más y de la manera correcta?

Por ejemplo, en mi caso, el ejercitarme seis horas diarias y vivir haciendo dietas no fueron suficiente para evitar que un análisis clínico en el 2016 me mostrara mi realidad: Nivel de glucosa sanguínea, triglicéridos y colesterol fuera de parámetros y hasta el tope. Nada antes había sido tan ilógico y desesperanzador en mi vida, así es que, me derrumbé.

Fue precisamente ese punto de quiebre el que me hizo reconocer lo hipnotizado que estaba con mis propios anhelos de éxito, con querer ser el súper héroe para todos excepto para mí, el gran atleta, y el empresario o el ejecutivo del año; aún cuando todo eso implicaba sacrificar mi vida personal, desvelarme crónicamente y menospreciar mi salud atascándome de medicamentos para aliviar todo tipo de malestar y seguir matándome de una manera inconsciente. Tras aquel diagnóstico lloré, me derrumbé, e imaginé lo peor, pero solo tenía dos opciones, conformarme o diferente para sanarme, así es que lo hice:

Para construir un mejor futuro en cuanto a mi salud, comencé por aceptar el momento y la circunstancia donde estaba parado.

Me apegué con fé al tratamiento e indicaciones médicas. De verdad, eso es lo más inteligente que debes hacer para empezar.

Reconocí en qué áreas de mi vida necesitaba estar mejor y elegí aquellas que era crucial atenderlas para requilibrar mi vida.

Por amor a todo, a todos los demás, empecé a priorizar mi cuidado y mis necesidades antes que las de los demás. Juré no volver a traicionarme.

Me preparé en nutrición integral y salud digestiva para tener un verdadero estilo de vida saludable que me permitiera sanar y aprender a cómo ayudar a otros a sanar también.

Créeme, no todo lo que encuentras en internet sobre salud es lo correcto, la mayoría de los médicos son expertos en tratamientos sí, pero no en de nutrición, preparación física, manejo de energía, manejo de estrés ni mucho menos de balance de vida. A demás, la industria alimenticia jamás se preocupará por tu salud, lo único que buscan es generar más ganancias; y alimentarse adecuadamente es mucho más que la dieta keto, hacer ayuno intermitente y consumir suplementos costosos.

Así es, aprendí a hacer mejores elecciones tanto alimenticias como en mi manera de vivir y relacionarme, para identificar que es lo correcto y lo incorrecto en el bienestar.

¿Qué te imaginas que sucedió seis meses después?

Tuvieron que realizarme dos análisis de manera continua porque mi examen de rutina mostraba que mis indicadores de salud se estaban dentro de los parámetros normales; así es que el segundo estudio fue para validar que los primeros resultados estuvieran correctos. Mi prediabetes había desaparecido para jamás regresar. Tiene sentido, pues nunca más volví a dejar, pero de verdad nunca más dejar, en último lugar mi integridad.

Gracias a mi experiencia, después he tenido la dicha de ver cómo una cantidad enorme de personas, hombres y mujeres, chicos y grandes, han reducido tallas de manera natural y para siempre, han hecho más eficientes sus tratamientos médicos y disminuido los síntomas de sus padecimientos, han reducido su hipertensión arterial, han aprendido a cabalgar su estrés laboral y personal que les estaba matando, lucen más jóvenes, volvieron a encender la chispa de sus vidas para disfrutarla con mejor actitud y muchas cosas maravillosas más.

Por eso sé, que tú también puedes logar todo esto y más, pero para esto no debes dudar más, necesitas confiar de verdad en ti, creer en que encontraras la solución a tu medida con la ayuda de un experto, y empezar a elegir lo más adecuado para la persona más importante de este mundo que eres tú.