¡Haz el cambio, vive en el presente y deja ir el pasado!

Cuando hablamos de este tema llegan varias preguntas a la mente ¿Qué es un ciclo? ¿Qué tipo de ciclos hay que cerrar? ¿Qué se necesita para cerrar un ciclo? y ¿Cómo le hago para cerrarlos?

Para dar respuesta a la primera pregunta podemos decir que un ciclo es una secuencia de pautas o conductas con un inicio, un desarrollo y un final; de tal forma que todo en la naturaleza es cíclico: el día y la noche, las estaciones climáticas, las relaciones interpersonales, las etapas de la vida, las etapas escolares, las relaciones laborales, la paz y la guerra, etc.

Desde la visión sistémica cerrar ciclos es fundamental y radica en mirar, reconocer, agradecer y honrar todo lo vivido y aprendido para poder soltar y de esta forma disponernos a tomar todo lo nuevo que la vida tiene para nosotros. Cerrar un ciclo es un proceso, que requiere un compromiso contigo mismo y del tiempo que sea el adecuado y necesario para ti.

En este punto quiero resaltar que comprometerse implica aceptar el desafío de la vida, las nuevas posibilidades que se abren, así como los caminos y las opciones, se requiere del compromiso y la voluntad para trabajar en un proceso de auto transformación, esto se dice fácil; sin embargo, hacerlo es un reto para que tú puedas asumir nuevamente tu poder personal, tu capacidad de elegir y el nuevo sentido que le quieres dar a tu vida.

Y ahora exploremos algunos de los ciclos que se pueden cerrar:

• Las relaciones afectivas (familia, pareja, amigos, colaboradores).
• La enfermedad, los duelos y las pérdidas.
• La soledad, el aislamiento y el evitar la sociabilización.
• El estrés, la angustia y los miedos catastróficos.
• Los temas laborales o de negocios.
• El apego, la culpa, el miedo, el resentimiento, el reproche y la recriminación.

Es importante reflexionar que un ciclo es todo aquello que se compone de momentos vividos, experiencias y sentimientos tanto agradables como desagradables, lindos y no tan lindos, a los cuales nos apegamos. El problema de esto es que muchas veces nuestro mente se queda atorada en, situaciones y personas del pasado que conforman periodos a los que deberíamos decir adiós. Es importante ser realistas, aprender a despedirnos cuando ya no formas parte de ese lugar, cuando persona ya no te está sumando y cuando tú ya diste todo lo que estaba de tu parte y no hay reciprocidad de sentimientos.

Ahora bien, vamos a comentar cómo puedo cerrar un ciclo, te recomiendo tener un cuaderno o algunas hojas blancas y una pluma para iniciar con la técnica que se llama “escritura terapéutica” y que es simple y sencillamente escribir las veces que sea necesario todo lo que necesitamos despedir y soltar, es importante plasmar todas las emociones y dejarnos fluir y expresar todo lo que se ha guardado. Es un proceso en el que tú decidirás qué tan profundo quieres ir.

Para iniciar este proceso te sugiero seguir estos pasos:

• Elije un solo tema o situación y sé lo más preciso posible (al trabajar en lo simple la mente puede capitalizar los eventos del pasado).
• Trabaja con metas alcanzables y sencillas porque una forma de fracasar es plantearnos lo impreciso, lo imposible y lo inalcanzable.
• Sé paciente y amoroso contigo, recuerda que una transformación requiere tiempo. Una vez que logres escribir todo y vaciarte, llegará un sentimiento de paz con tus historias pasadas, para seguir avanzando sin que ese pasado afecte tu presente.

Una vez que hayas terminado con la escritura te sugiero hacer un pequeño ritual, da un siguiente paso y toma estas hojas en tus manos, y rómpelas. En seguida, prende fuego y mira como todo esto se transforma en cenizas. Hay ocasiones en que nos costará trabajo que las hojas prendan y a veces prenderán muy fácilmente. Aquí, reflexiona cuál es el mensaje para ti. Finalmente junta estas cenizas y entiérralas en un jardín o en una pequeña maceta que tengas en casa. Al realizar éstas acciones estás enviando a tu inconsciente el mensaje de que rompes con todo este pasado y lo entierras. Con ésto, has cerrado un ciclo.

Recuerda que un cierre de ciclo, siempre significa que me abro a un nuevo comienzo. Es aquí, donde se abre la oportunidad de poner toda tu atención, energía, creatividad y entusiasmo. Ve creando nuevos aprendizajes, experiencias y lecciones de vida que te preparen para ir construyendo ese camino hacía lo nuevo, hacia crear el futuro que si quieres y el que mereces.

Aportación de Angélica Ostoa Montes

Terapeuta en Constelaciones Familiares

FELICES FIESTAS DECEMBRINA, CELEBRA Y DISFRUTA AL MÁXIMO.

WhatsApp: 55 18 00 72 40

Correo Electrónico: angeom@hotmail.com

Facebook: Angélica Ostoa Montes

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Semblanza de Angélica Ostoa Montes TERAPEUTA Y CONSULTORA.

Angélica es una mujer que está al servicio de la vida y del ser humano comprometida con su evolución y crecimiento.

De primera formación es Ingeniera Química y Maestra en Ingeniería Ambiental, egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Cuenta con 20 años de experiencia en áreas de consultoría empresarial y de capacitación, diseñando, desarrollando e impartiendo cursos, seminarios y talleres vivenciales para atender diversas problemáticas a nivel individual, grupal y organizacional tanto a nivel técnico, como en el área de ventas. En el área de desarrollo humano.ha trabajado y colaborado en diversas organizaciones de la iniciativa privada y del sector público.

Hace 14 años se interesa en el desarrollo humano y estudia diversos entrenamientos en técnicas terapeúticas como son: Constelaciones Familiares, SAAMA, Hipnosis Ericksoniana, Access Consciousness y Biomagnetismo. Ejerce su segunda formación como terapueta desde hace 12 años impartiendo cursos y talleres vivenciales para atender diversas problemáticas a nivel individual, grupal y organizacional. También realiza sesiones de terapia individual y de pareja.

Su misión de vida es acompañar a otros seres humanos para fortalecer su camino de crecimiento y desarrollo personal. Trabaja con estos cinco valores: servicio, honestidad, pasión, cuidado y respeto.

Su propósito como terapeuta y facilitadora es acompañar en el proceso de cambio a todo el que quiera disfrutar de la vida, florecer y verlo manifestado en su salud y bienestar general.